Publicado por M. E. González
16/09/2010
Cuando con nuestra sabiduría arcaica afirmamos que los jóvenes de hoy no saben concentrarse, deberíamos decir más bien que no focalizan su atención en los antiguos mecanismos de aprendizaje:¡No me molestes, mamá; estoy aprendiendo!, se titula el libro de Marc Prensky, el mejor científico dedicado a desvelar los secretos de los videojuegos y los programas de ordenador.¿Para qué otras cosas sirven los videojuegos con los que mis nietas consumen horas cuando les dejan?
Un gran cirujano del Beth Israel Hospital dice: «Utilizo exactamente idéntica coordinación entre la vista y los movimientos de la mano cuando opero que cuando juego a videojuegos».tecnofilos.aprenderapensar.net/2010/09/16/e...